Este blog está un poco desfasado. El día 21 corresponde al sábado y este sábado fui al intensivo de Isha, eramos 430 personas. Había un grupo de personas nuevas que estaban aprendiendo, pero me parece que por lo menos la mitad, estuvimos todo el tiempo unificando. Es impresionante lo profundo que uno puede ir al ser tantos. Y ahí viene la claridad y uno empieza a entender muchas cosas de su vida, se siente como si hubiese vivido ciego y sólo entonces empieza a ver. Particularmente el sábado noté como siempre me estaba separando de las personas para protegerme, pero lo bueno es que verlo es el primer paso para sanarlo. Tengo la impresión que antes era como andar a tientas y que de repente se hubiese prendido la luz y todo se vuelve tan claro y fácil que ya nunca podría volver a lo de antes.
Me sorprendió y me puso contenta que ese día algunas personas se me acercaron para comentarme del blog, que les gustaba, que lo leían, fue bakán. Otro motivo más para seguir escribiéndolo aún con más ganas.
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