viernes, 4 de noviembre de 2011

Día 36: Escape

Últimamente no he socializado mucho, en parte porque por momentos tengo esa sensación de no encajar, aunque afortunadamente he podido sanarla y soltarla con el correr del tiempo. Excepcionalmente, ayer estuve en el cumpleaños de una amiga, todo muy bien, pero me fijé en que mayoría de las personas que asistieron, de mi misma edad, tenían vidas de adultos y, aunque siempre procuro no compararme,  no pude evitar sentirme diferente y con un deseo infinito de escapar de esto y de la presión social, que en el fondo no era más que un reflejo de mis propios juicios.

Es que quiero hacer los 6 meses, porque tengo ansias de conciencia, pero a veces también lo veo como un posible escape de situaciones estresantes, como por ejemplo que no soy independiente y que todavía no me hago cargo de mí misma. Analizándolo fríamente, mi vida es buena, he superado varias limitaciones, miedos, apegos; básicamente, podría decir  que he logrado bastante paz y si la pierdo puedo recuperarla con facilidad. Pero lo que tiene que ver con la responsabilidad continúa siendo una piedra en el zapato y en el fondo sé que no puedo seguir comportándome de este modo.

En todo caso, la idea del escape es sólo ilusoria, ya que en la I precisamente uno se encuentra con su propio estrés para poder enfrentarlo y eso siento que es lo que necesito ahora.

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