Hoy tuve jornada de unificación, mientras practicaba me aparecieron todos los pensamientos de lo que significaba el programa de 6 meses, pensaba "en qué me voy a meter". También me venían otros, como que no todo en la vida es conocerse a sí mismo y similares. Entonces empecé a sentir miedo, pero expresándolo pude ver que sólo eran ideas, en el corazón mantenía intacto el deseo de ir y hacer este cambio en mi vida.
Después hablando con una amiga, me contó que a ella le pasaba lo mismo. Es increíble como la mente se pone frenética al sentir que viene un gran cambio y el miedo es más que nada a lo desconocido, pero también a crecer, porque conlleva una mayor responsabilidad. Pero ahora a enfocarme en mi deseo y no en los miedos que puedan aparecer. Quedarse en el lugar cómodo es lo más fácil, pero no es lo que nos da felicidad, así que ya no hay vuelta atrás y como decía Julio César: "La suerte está echada".
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